Iluminando el Futuro: Alternativas a la Lámpara Incandescente

Entre las opciones alternativas a las lámparas incandescentes se encuentran los conocidos como focos ahorrativos que usan tecnología fluorescente y las luces LED entre otros.

Las luces LED son un 90% más competentes que las bombillas incandescentes y duran 10 veces más que las CFL, por lo cual la frecuencia de cambio de las bombillas LED se disminuye sensiblemente.

¿Qué tipos de lámparas existen?

• LED.
• Bombilla de flash xenón.
• Lámpara incandescente.
• Lámpara halógena.

Las bombillas incandescentes producen de 15-20 Lm/W, lo que se traducen en una sola eficacia del 4-5%. Las fluorescentes producen 80-90 Lm/W que representa un 20-23% de eficiencia. En el caso de los LEDs, van de 100-1200 Lm/W que están haciendo un 25-305% de eficiencia.

¿Por qué tenemos que utilizar focos ahorradores? Un foco ahorrador consume 75% menos energía eléctrica y ardua hasta 10 veces más que un foco incandescente, por lo cual vas a pagar menos en tu recibo de luz. Asistimos al medio ambiente porque desprenden menos calor que los focos normales y disminuye las emisiones de dióxido de carbono.

Los focos ahorradores consuman hasta 80% menos que los incandescentes ; y los LEDs hasta dentro de un 85%. Al ser ahorrativos de energía, están pudiendo durar de 8 a 10 años, si se emplean en promedio de 3 a 4 horas cada día. Generan 80% menos de calor que los incandescentes, lo cual disminuye el peligro de incendio.

Los focos incandescentes o clásicos son aquellos que empiezan a calentarse a través de un filamento de tungsteno por donde recorre la electricidad, hasta llegar a una resplandecencia que genera la luz.

Tipos de bombillas que podés hallar

• Bombillas incandescentes: se produce luz al calentar un filamento.
• Halógenas: son focos pequeños y con mucha potencia.
• Fluorescentes: se fundamentan en una tecnología competente, que combina gases y sales que emiten luz al contacto con una corriente eléctrica.

Lámparas LED
Ahorran hasta un 80% de electricidad, con respecto a las clásicos. Amontonan menos calor que las lámparas de bajo consumo, con lo que su consumo es menos, puesto que, no están perdiendo energía a través del calor que amontonan. Cuentan con gran pluralidad de formatos y colores de iluminación diferentes.

Focos LED. Los focos LED tienen una mejor eficacia energética, que quiere proferir que la energía que consumen se aprovecha en infligir luz y no en calentar el foco. La luz que producen consume 40% menos energía que un foco clásico. Duran a caballo entre 30 mil y 50 mil horas, así es que su vida util es más larga.

Ahora bien, las bombillas LED consumen un 80% menos y apenas producen calor, mientras que las de bajo consumo consumen un 70% menos de energía pero pierden parte en forma de calor. Por su parte, la vida útil de las bombillas LED es bastante más duradera que la de las bombillas de bajo consumo.

Bombillas que utilizan el fenómeno de la termoradiación: incandescentes y halógenas incandescentes. Lámparas de descarga que utilizan el fenómeno de luminiscencia: lámparas fluorescentes, lámparas de descarga de vapor de agua de mercurio y vapor de agua de sodio, lámparas de halogenuros metálicos.

Las luminarias se clasifican según el grado de protección versus el polvo, los líquidos y los golpes. En estas mismas clasificaciones, según las reglas nacionales (UNE 20324) e internacionales, las luminarias se designan por las letras IP seguidas de tres dígitos.

Las lámparas incandescentes convencionales se emplean como para cualquier clase de iluminado donde no sea necesario un mantenimiento elevado, puesto que su vida util es trocea y además tiene de una disminución del flujo lumínico elevado por culpa del ennegrecimiento de la ampolla.

Por otro lado, las fuentes de luz incandescentes producen luz calentando un filamento hasta que se pone rojo. Las lámparas lineales y espesas fluorescentes emplean una descarga UV y fósforo para producir la luz. Las lámparas HID utilizan la ionización de gases en un cilindro de descarga que a su vez genera fotones.

Las lámparas fluorescentes compactas presentan como ventajas acerca de las lámparas incandescentes, una mayor vida util, mayor flujo luminoso, emisiones lumínicas únicamente dentro del rango visible ser humano y consumo de energía menor de edad.

En nuestros propios días, se consideran poco eficientes, puesto que desperdician entre el 80 y 90 por ciento de la electricidad que consumen y la desperdician en calor. Su vida util generalmente es de 750 a 1000 horas, siendo su ventaja primordial el precio barato al cotejarlas con las lámparas fluorescentes.