Piel de Nobuck: ¿De qué animal?

El nobuck corresponde a la región de la piel. Se identifica por un limado muy, muy fino de la capa superior hasta que aparece una textura más homogénea y suave. Este mismo material natural succiona con sencillez el polvo y la porquería, y si bien también es muy estético, no es recomendable para calzado de muchísimo uso o bien de contienda.

La piel de nobuck es idónea para empleos de alta resistencia, como puede llegar a ser el calzado. Su elevada valía es ideal como para artesanías, ornamentos, etc. Su tacto es aterciopelado, proporcionando una sensación muy cómoda y limpia.

El ante, bayeta o suede es un género de piel de alce u otros animales adobada y curtida.

Para sostener y limpiar convenientemente el zapato de cuero nobuk, el procedimiento ideal es cepillarlo con un cepillo suave con cierta frecuencia. Como resultado, eliminamos el polvo que se acumula por el empleo y eludimos las manchas que van a ser más difíciles de eliminar dentro del futuro.

El cuero de ante es el término colectivo para todos los modelos de cuero con una superfície pulimentada. El cuero de ante incluye, entre algunas otras muchas cosas, el nubuck o bien el cuero de gamuza que se ha limado dentro del lado del grano y que se consigue de la brecha. En lenguaje coloquial, el cuero de bayeta es asimismo llamado cuero de ante.

La piel de ante se identifica por ser la zona pegada a la carne y no de la castra externa de la piel, es decir, ‘la piel del revés’. Es un tejido natural muy suave y muy fino que acostumbra a destinarse a calzado de gama alta.

Muchos creen que el ante es diferente a la bayeta 26 ¡y es un error! Significan lo mismo. Este mismo género de piel se consigue merced a tratamiento de la piel vuelta, es decir, la piel se trabaja y se lija en la parte posterior.

El nobuk es un tipo de cuero de vaca, parecida al ante, pero con substanciales diferencias. El proceso de fabricación es diferente, el pulimentado y curtido se efectúa acerca de la cara exterior de la piel, lo cual dentro del mundo se conoce como flor . Así se genera el propio tacto afelpado del nobuk.

La piel nobuck es uno de los materiales con los que se fabrican diferentes accesorios, en especial calzado. Además de ser un material muy elegante, otorga una excelente comodidad. No obstante, es uno de los materiales más frágiles y que mayores cuidados precisan para que su vida util sea lo más larga posible.

El nobuck es un acabado que se le da al cuero plano por el lado externo de la piel con un pulido que levanta unas pequeñas fibras, dejándolo suave al tacto. Este acabado aterciopelado realiza que el cuero sea más transpirable y suave. Del mismo modo, lo hace poroso y absorbente por lo que demanda un mayor cuidado.

Piel de cabra
Son las pieles de mayor valía por su estructura espesa y excelente tacto. La más utilizada como para los zapatos de ataviar por su alto brillo. Son muy finas y por ende son muy elásticos pero a su vez muy resistente.

La piel de ante se caracteriza por ser la región pegada a la carne y no de la castra externa de la piel, o sea, ‘la piel al revés’ o «piel vuelta». O sea, la piel se vuelve, y se trabaja con procesos de pulido y curtido acerca de la parte interior, es un tejido natural muy suave y finísimo.

El cuero de ante se emplea para muchos productos diferentes. De forma frecuente se emplea para zapatos de verano livianos, pantuflas de deporte o ropa de alta valía, en tanto que este cuero es muy transpirable. Merced a la estructura de poro abierto, el vapor de agua y el sudor pueden escapar mejor que con el cuero liso.

Buscá una pequeña lija o lija suave y frotala sobre el nobuk sucio. De esta manera, vas a lograr desprender la mancha. No frotes con obliga, ya que el material puede descolorarse. Podés secar los zapatos con un secador de cabello, pero no los pongas al sol, puesto que son propensos a perder su color.

Cómo limpiar piel nobuck

1. Evita limpiar con agua. Como ya hemos dicho, el principal enemigo del ante o el serraje es el agua.
2. Evita el polvo. Junto con el agua, el polvo es uno de los grandes oponentes de este material.
3. Emplea vapor de agua.
4. Papel de periódico.
5. Emplea polvos de talco o sal fina.

Humedecer con agua un paño de microfibra (a fin de que no deje pelusas). Podemos agregar un tanto de jabón neutro o bién unas gotitas de amoniaco y frotar toda la superfície haciendo círculos. Es recordable experimentar primero en una región poco visible del calzado y luego elaborarlo en la plenitud del mismo.