El Color del Mar: La Belleza de los Corales

Los ecosistemas de los arrecifes de coral son conjuntos intrincados y diversos de especies que interactúan a caballo entre sí y con el entorno físico. Los corales son una clase de colonia de animales que se relacionan con los hidrozoos, las medusas y las anémonas de mar.

LA IMPORTANCIA DE LOS ARRECIFES DE CORAL
Además, son un señuelo turístico que genera ingresos milmillonarios, nos protegen de las inundaciones y los tsunamis, contribuyen a la seguridad alimentaria mediante la pesca y se incluyen en algunos medicamentos frente a el cáncer.

Los corales son organismos coloniales formados por centenares o miles de niños animales denominados pólipos o bien zooides, y comparten parentesco con las medusas y anémonas. Los corales marinos se caracterizan por sus propios colores atractivos, pero en verdad, los corales (los pólipos) carecen de color.

Hay dos tipos primordiales de corales: corales duros y corales blandos. Los corales escabrosos, como el coral cuerno de alce y el coral cerebro, crecen en colonias y acostumbran a llamarse « corales constructores de arrecifes». Los corales duros crean esqueletos de carbonato de calcio, una substancia caliza dura.

Los corales son, en verdad, pequeños animales, llamados pólipos, con forma de mini conchas que están pudiendo constituir colonias. Estos pólipos forman un esqueleto común que para algunas especies se convierte en la base de un arrecife de coral.

Los corales son animales que forman parte del paisaje submarino, viven unidos formando colonias de hasta miles de individuos. Al conjunto de unas cuantas colonias de diferentes especies de coral se les conoce como arrecifes y conforman ecosistemas con una gran biodiversidad, pero sus cualidades van más allá.

Los arrecifes se encuentran dentro de una franja que se forma entre el Trópico de Cáncer y el Trópico de Capricornio y en general del lado oriental de los continentes. Ésto se tiene que a que los grandes sistemas fluviales desembocan en las costas oeste de los continentes arrastrando sedimentos que enturbian las aguas.

Los arrecifes de coral, presentes en más de 100 países y territorios de todo el mundillo, sustentan la biodiversidad oceánica y confieren importantes beneficios baratos, sociales, recreativos y educacionales.

Los arrecifes de coral son uno de los ecosistemas más diferentes y biológicamente complejos del mundillo. Una cuarta parte de toda la vida marina depende de los arrecifes de coral para obtener víveres y refugio. Los arrecifes de coral incólumes favorecen a las comunidades de muchísimas maneras.

Arrecifes de coral: un oasis de vida
Para los peces y otros animales marinos, los corales proporcionan un reducto versus los depredadores, como un lugar de reproducción y un vivero para muchas especies. Son la base importante de la vida marina en los trópicos.

Los arrecifes de coral estan formados por pólipos de coral que secretan capas de carbonato de calcio bajo su cuerpo. Los corales que forman arrecifes se conocen como corales «duros» o «constructores de arrecifes». Los corales blandos, como los abanicos de mar y los látigos de mar, no producen arrecifes.

Los corales marinos son animalitos coloniales, salvo excepciones, pertenecientes al filo Cnidaria, la mayoría a la clase Anthozoa si bien en ciertos son de la clase Hydrozoa (como Millepora). Los corales están formados por cientos o miles y miles y miles de individuos llamados zooides y están pudiendo lograr grandes dimensiones.

Los corales son una clase de colonia de animales que se relacionan con los hidrozoos, las medusas y las anémonas de mar. Los corales pétreos, un género de coral caracterizado por su esqueleto duro, son el lecho del arrecife. Las colonias de corales pétreos estan compuestas por centenares de miles de pólipos individuales.