¿Cómo cuidar las carteras para que no se peleen?
¿Cómo se conservan los bolsos?
¿Cómo cuidar la piel de un bolso?
- Recubra la pieza con una funda cuando no se utilice.
- Es adecuada rellenar el bolso con papel de periódico o bien de gacetas toda vez que lo guarde.
- Guardarlo en un lugar seco y defendido de la luz solar.
- Evita el exceso de peso.
- ¿Qué hacer si la piel se reseca?
¿Cómo arreglar una bolsa que se está pelando?
Con un paño limpio y no felposo, impoluta el jabón del bolso. Aplica goma blanca escolar acerca de las fisuras y peladuras del bolso. Emplea un pincel o bien brocheta para extender la goma sobre las superficies dañadas. Deja que la goma se seque y, despues, tiñe con betún para cueros y calzado las regiones que lo requieran.
¿Cómo arreglar una correa de un bolso?
- Abra el Super Bonder Flex Gel de forma vertical.
- Asegúrese de que las superficies estén limpias y secas.
- Una inmediatamente las dos partes con firmeza y realice presión hasta el instante en que el producto haya pegado totalmente.
- Una vez antipático, la correa del bolso va a estar firme y lista para utilizar.
¿Cómo realizar para que las carteras no se peleen?
¿Cómo se conservan las carteras?
Si tenés carteras o bolsos voluminosos, te recomendamos que las rellenes con papel. Así evitás que se deformen o bien que el material quede marcado en algún lado. Si tenés bolsos de lona o bien mochilas, te resulta conveniente almacenarlos estirados y apilados. Así ahorras espacio y preservas sus formas.
¿Cómo sostener en muy buen estado las carteras de cuero?
¿Cómo resguardar las bolsas de la humedad?
¿Cómo guardar bolsos de cuero?
- Envuélvelo siempre y en todo momento en una sola funda cuando vayas a guardarlo.
- Si vas a tener tu bolso guardado a lo film de mucho tiempo, rellénalo para que no se deforme.
- Jamás lo dejes expuesto a la luz solar, puesto que padecerás el riesgo de que se vaya el color.
- No los apiles unos sobre otros.
¿Cómo se hidrata el cuero?
Para nutrir e hidratar, con la pieza bien seca, aplicamos una fina castra de linimento ayudándonos con una esponja o un paño seco y nítido. En casos de cueros muy secos y recios, aplicamos más capas de bálsamo en la carne (parte rugosa del cuero) cuidadosamente de no resquebrajar la flor (parte plana del cuero).