Rupestres: Arte de la Prehistoria

En las pinturas rupestres del Paleolítico se simbolizan animalitos y líneas. Dentro del Neolítico se representaban animalitos, seres seres humanos, figuras, símbolos, el medio de comunicación entorno y manos, representando además el comportamiento habitual de las colectividades y su interacción con las criaturas del entorno y sus deidades.

Las técnicas del arte paleolítico eran muy sencillas. Se hacían con pinceles, trozos de lignito, pedazos de hueso o con los dedos. Los colores eran muy básicos y en general se empleaba solo uno si bien también utilizaron dos o bien tres en escenas de montería como para representar movimiento o bien sombras.

Características del arte prehistórico
A nivel general, puede decirse que el arte prehistórico se caracteriza por el esquematismo, el simbolismo y la abstracción. Se trata de expresiones con fines rituales o mítico-religiosos, en contraste al arte contemporáneo, que señala a lo estético.

Las pinturas rupestres son más o bien menos homogéneas en cuanto a su temática. Las provenientes del Paleolítico exhiben en general dibujos de animales y líneas. Dentro del Neolítico empiezan a aparecer las figuras humanas, las huellas bajo cero de manos humanas y otras representaciones del enclave, como hojitas, etc.

Características del Paleolítico
El período temporal del Paleolítico se caracterizó por: Las poblaciones eran nómades y acostumbraban a movilizarse en pequeñas tribus o conjuntos reducidos. Las actividades primordiales eran la recolección de frutos y la cinegética. Se dio el hallazgo del fuego, durante el Paleolítico muy inferior.

El arte paleolítico acostumbraba a significar individuos apartados o en grupo pero no escenas como tal (salvo ciertas excepciones). Los tres temas primordiales que aparecen en todas las representaciones artísticas son los animales (80% del número total), los seres humanos y los signos.