Comiendo Pepinos: ¡Todo desde la Piel!

El pepino se consume acerca de todo crudo en ensalada y resulta muy refrescante. Los ejemplares jóvenes pueden consumirse con piel como para sostener su contenido en fibra y vitaminas, sin embargo, es aconsejable pelarlos para simplificar su digestión.

Finalmente, la cáscara de pepino tiene importantes beneficios en cuanto la consumes, es una gran fuente de fibra, por lo cual mejora la digestión, su vitamina K ayuda a tonificar los huesos, ayuda a disminuir la presión arterial, funciona como un desintoxicante y es bajita en calorías, por lo cual resulta óptima como para las dietas.

Lo más muy común es comer pepino fresco y crudo solo o acompañado con distintos vegetales en ensalada. Mejor comerlo con piel, puesto que sostiene así todas sus vitaminas y fibra, de manera especial si son ecológicos, garantía de que no contiene químicos ni transgénicos.

Las cáscaras de pepino son ricas en fibra insoluble, un género de fibra que barre mediante tu tracto digestible como una escoba, creando masa fecal. También ayuda a aliviar el estreñimiento y es un factor esencial para sostenerte coordinar.

Como mentamos previamente, la cáscara del pepino se tiene que aprovechar en su plenitud en tanto que es riquísima en fibra insoluble, como la parte blanda interior del pepino que asimismo aporta algo de fibra soluble, siendo las responsables de contribuir al adecuado tránsito intestinal.

En primer lugar, es muy rica en fibra y previene inconvenientes digestibles. También la cáscara es muy baja en calorías, de exactamente la misma manera que su pulpa, por lo que no te posees que preocupar por romper la dieta. De forma contraria: estas mismas te aportan energía como para tu día a día. Por otra parte, enumera con vitamina K, que fortalece los huesos.

Como para aprovechar al tope el aporte de vitaminas es esencial consumir pepinos con su piel -donde se encuentra un enorme porcentaje de sus propios nutrientes- y, mucho mejor, pepinos ecológicos (sin químicos ni transgénicos).

Comer un pepino al día genera una buena cantidad total de nutrientes dentro del organismo, entre los más importantes están las vitaminas del sofisticado B, las que son idóneas para favorecer la salud celular y, además, proporciona al cuerpo ácido fólico, vitamina C, calcio, hierro, magnesio, fósforo, potasio y zinc.

Ideal para rejuvenecer la piel y mitigar las arrugas.
Gracias a las propiedades antioxidantes originadas por las vitaminas A, C y E que contiene el pepino, ayuda a pausar el envejecimiento de la piel y mantenerla joven y reluciente.

Elaboración

1. Lo primero que vamos a hacer es cortar y exprimir los limones.
2. Luego cortaremos (y pelaremos si lo estás deseando) los pepinos.
3. Vamos a batir todo muy bien así como medio de comunicación litro de agua.
4. Finalmente colaremos el zumo y lo diluiremos con el medio litro de agua restante. Y listo!!

De consenso con la Guía práctica de verduras de Consumer Eroski, el pepino aporta fibra, pequeñas cantidades de vitamina C, provitamina A y de vitamina E, y, en proporciones todavía menores, vitaminas del grupo B semejantes como folatos, B1, B2 y B3. En su piel se hallan niñas cantidades de beta-caroteno.

Es 90 % agua, por lo que resulta impresionantemente refrescante, hidratante y diurético. Rico en vitaminas, mayoritariamente las vitaminas A, B y C.

El pepino es rico en vitamina C, la cual tiene un efecto natural revitalizador en la piel y gradualmente puede clarificar tu tono de piel. En los dias en los que tu piel se sienta apagada, aplica un exfoliante facial de pepino como para revitalizar la piel y recuperar el brillo natural.