Vida Silvestre del Ajolote: Descubriendo su Hábitat Natural

El axolote es longevo, alcanza hasta 15 años de edad alimentándose de moluscos, vermes, larvas de insectos, crustáceos y algun pez. Ésta especie, acostumbrada al papel de depredador en su hábitat, ha comenzado a sufrir la introducción de voluminosos peces en su hábitat lacustre.

Los ajolotes chupan a sus propios presas, que incluyen crustáceos, moluscos, huevos de insectos y peces pequeños. Localizados únicamente en Xochimilco, en torno a la Urbe de Méjico, los ajolotes se distinguen de la mayoría de las algunas otras salamandras en que viven permanentemente en el agua.

Los ajolotes necesitan agua fresca a unos 15-18ºC. Si el agua está a temperaturas mayores éstos anfibios se están viendo predispuestos a infecciones y además de esto corremos el peligro de que completen la metamorfosis saliendo a la superfície y muriendo poco tiempo después.

El hábitat del ajolote puede llegar a ser solamente acuático, no obstante, como el anfibio que es, existen especies que, al lograr la adultez, acontecen a vivir en tierra firme.

Los endler (Poecilia wingei) son peces bonitos e inofensivos que acostumbran a convivir bién con el ajolote. Asimismo son muy veloces lo cual realiza que sea más difícil para el anfibio atraparlos. Quizás sean la mejor opción.

De consenso con Luis Alfredo Cruz Ramírez, adscrito a la UGA, el ajolote del altiplano es capaz de efectuar metamorfosis en contestación al entorno después de que alcanza la madurez sexual; o sea, al haber un cambio en temperatura o bien nivel de agua se se transforma en una salamandra terrestre.

A pesar de que en Méjico moran 18 de las 33 especies de ajolotes existentes, gran parte de los estudios se han centrado en una sola sola.

La desaparición del ajolote, muy relacionado a la historia de Méjico a partir de la temporada de los mexicas, supondría una pérdida no solo a nivel ambiental, sino también dentro del aspecto cultural.

Sostener su enclave con agua de muy, muy buena valía. Prepararle un acuario amplio de 70-100 cm, y de unos 15 cm de profundidad, que le permita nadar de forma libre. Procurarle un hábitat adecuado en un ambiente con poca luz.

Es originario de México y puede toparse en lagos y canales de la Ciudad de México y sus propios aledaños. El ajolote es una especie en riesgo de extinción, pues las últimas estimaciones ubican la población actual en menos de 1,000 ejemplares.

La introducción de especies dentro del lago Xochimilco es otra razón por las que la población de este mismo anfibio disminuye. Concretamente, le ha perjudicado la introducción de tilapias y carpas que han prosperado realmente bien en este enclave, quitando comestible a los ajolotes y siendo sus propios depredadores, ya que también se los comen.

La primordial importancia del ajolote en la naturaleza se vincula a su papel en las cadenas tróficas. Esto se está refiriendo a que son predadores de una gran cantidad de insectos, vermes, babosas, caracoles, lombrices y renacuajos.

El ajolote es un anfibio endémico del Valle de México que hoy día solo vive en en ciertos rincones de una red de canales del lago de Xochimilco que ocupan una superficie número total de 180 quilómetros cuadrados.

La mayoría de los ajolotes son negritos o marrones moteados, pero asimismo existen variedades con piel blanca y branquias rosadas o rojas. A cada lado de la cabeza, el ajolote enumera con unas cuantas branquias externas con aspecto externo de plumas que le proporcionan oxígeno y su aspecto externo único.

Los ajolotes alguna vez poblaron la mayor una parte del area lacustre del Val de Méjico. Hoy la cuestión es muy distinto; su hábitat se disminuye solamente a los canales de Xochimilco, donde, además de esto, solo moran en un espacio de 10 quilómetros cuadrados.

Es un anfibio carnívoro cuya alimentación se compone de niños crustáceos, larvas de insectos, vermes, babosas, caracoles, lombrices, renacuajos y algún pez.

Es una especie endémica de Méjico, no en vano solamente se halla en el lago de Xochimilco, adonde subsiste en peligro crítico.