Los cuernos de corzo son una joya de la naturaleza que capturan la belleza y la elegancia de estos majestuosos animales. Utilizados en la decoración y el mobiliario, los cuernos de corzo agregan un toque de sofisticación y estilo a cualquier espacio. Sin embargo, es importante tener en cuenta el precio de estos cuernos antes de adquirirlos.
¿Cuánto cuesta el kilo de cuernos?
El comercio de cuernos de ciervo es una industria en crecimiento, especialmente en países como China, donde se valoran por sus supuestas propiedades medicinales y afrodisíacas. Es importante destacar que el comercio de cuernos de ciervo está rodeado de controversia y ha generado preocupación debido a la caza ilegal y a la disminución de las poblaciones de ciervos en algunas regiones.
En el mercado, el precio de los cuernos de ciervo puede variar dependiendo de su calidad y origen. En general, el kilo de cuernos puede alcanzar un precio de alrededor de 30 euros en China. Sin embargo, es importante mencionar que este valor puede fluctuar debido a factores como la demanda y la oferta, así como a la disponibilidad de cuernos en el mercado.
Es necesario señalar que la venta y compra de cuernos de ciervo está regulada en muchos países, y en algunos casos, su comercio puede ser ilegal. Además, es importante recordar que la creencia en las propiedades medicinales de los cuernos de ciervo no está respaldada por evidencia científica.
¿Cuándo le salen los cuernos al corzo?
Los cuernos del corzo, también conocidos como cornamentas, son una característica distintiva de esta especie de ciervo. Los corzos machos desarrollan sus cuernos a partir de pequeños bultos óseos conocidos como «botones». Estos botones suelen caer entre enero y febrero, dejando los pivotes o apófisis supraciliares preparados para que de ellos nazcan las cuernas posteriores. Este proceso de desprendimiento de los botones y crecimiento de las nuevas cuernas ocurre durante la primavera, cuando los corzos experimentan un mayor crecimiento y desarrollo.
La nueva cuerna del corzo crecerá entre los meses de febrero y abril, mientras los adultos descorrean. Durante este período, las cuernas crecen rápidamente, alcanzando su longitud máxima en aproximadamente tres meses. Una vez que han alcanzado su máximo crecimiento, los corzos utilizan sus cuernas para marcar su territorio, luchar por el apareamiento y defenderse de posibles depredadores. Las cuernas del corzo son ramificadas y están formadas por una serie de puntas o «palmos», que pueden variar en número y forma según la edad y la genética de cada individuo.
¿Cómo se llaman los cuernos de los corzos?
En el caso del corzo, la cuerna es un carácter exclusivo de los machos y, por tanto, su desarrollo y caída anual depende del ciclo de la testosterona segregada por los testículos, entre otras hormonas intervinientes en el proceso de desarrollo de este carácter. Las cuernas del corzo son estructuras óseas que se desarrollan en la cabeza de los machos y son utilizadas principalmente para la defensa y el establecimiento de jerarquías sociales durante la época de apareamiento.
Las cuernas del corzo son ramificaciones óseas que crecen anualmente y se renuevan cada primavera. Durante el invierno, las cuernas se caen y comienza un nuevo ciclo de crecimiento. El proceso de crecimiento de las cuernas se llama «desmogue» y suele ocurrir entre los meses de noviembre y diciembre. Durante este proceso, los machos pierden las cuernas viejas y comienzan a desarrollar las nuevas.
¿Cómo son los cuernos del corzo?
La forma típica de una cornamenta de corzo es de seis puntas, pero hay excepciones y anomalías muy frecuentes. Las más típicas son los denominados “botones”, que son ejemplares jóvenes con cuernos muy cortos y deformes. Estos botones suelen ser lisos y redondeados, y se localizan en la parte frontal de la cabeza del corzo. A medida que el animal va creciendo, los cuernos se van ramificando y alargando, formando las típicas seis puntas.
Los cuernos del corzo están formados por una estructura llamada asta, que está compuesta principalmente por queratina, la misma sustancia presente en nuestras uñas y cabello. Las astas son muy sensibles y se renuevan cada año. Durante el invierno, los corzos pierden sus cuernos, y en primavera vuelven a crecer. Los cuernos suelen tener una longitud de entre 10 y 20 centímetros, aunque en algunos casos excepcionales pueden llegar a medir hasta 30 centímetros. La forma y tamaño de los cuernos pueden variar según la genética de cada individuo y las condiciones ambientales en las que se encuentre.