Fingiendo el Llanto

Relájate, respira y concéntrate en lo cual le sucede aquí y ahora a tu personaje. Si omites toda distracción, y te centras sólo en tu personaje y la escena que vives con tu compañero, vas a poder ahondar mejor en las emociones que estás deseando expresar.

Rememorar fracasos o tristezas previas muy frecuentemente no funciona y en en ciertos casos hay que usar truquillos que provoquen el lagrimeo como emplear gotas con cristales de mentol en los ojos para provocar el lloro, enfocar la mirada cara una luz refulgente hasta que se siente que los ojos comienzan a humedecerse y acto

Si su cara no refleja dolor, sus propios lágrimas son ilusorias.
En cuanto una persona finge llorar, olvida que su rostro tiene que manifestar sus emociones, ya sea euforia, tristeza, preocupación, miedo o ira. Luego entonces, lagrimea pero no muestra sentimiento alguno.

Puedes untarte una pequeña cantidad de crema de menta debajo de los ojos como para provocar que lagrimeen. Asimismo puedes usar mentol en barra, que es muy semejante a un bálsamo labial con mentol y alcanfor que sirve como para realizar que los ojos lloren.

Causas

1. Alergia al moho, la caspa, el polvo.
2. Blefaritis (inflamación durante el borde del párpado)
3. Obstrucción del conducto lacrimógeno.
4. Conjuntivitis.
5. Polución o productos químicos dentro del aire o el viento.
6. Luz refulgente.
7. Eversión del párpado cara adentro o cara afuera.
8. Algo en el ojito (como polvo o arena)

Tips para poder llorar

1. Sentir de manera consciente el bloqueo. La primera recomendación que ofrece Fabiola Grutas desde su experiencia es sentir conscientemente el bloqueo.
2. Platicar en voz alta. El segundo consejo que aconseja Fabiola Grutas es platicar en voz alta.
3. Ver películas tristes.

No puedo llorar ¿a qué se debe? Cuando hay una sospecha de un posible trastorno sicológico, lo que siempre y en toda circunstancia tiene que hacerse en primer lugar es descartar inconvenientes fisiológicos. A menudo, detrás de una falta de energía, bajita motivación, desánimo e insomnio puede habitar por ejemplo, un dilema en la tiroides.